En Archipiélago los jugadores representas potencias europeas renacentistas que compiten en la exploración de un archipiélago del Caribe. Exploran territorios, recolectan la cosecha y los recursos, que se utilizan tanto en los mercados internos (para su uso y el de los nativos) como externos (para venderlo en Europa), construirás mercados, puertos, ciudades y templos, y negociareis entre sí (y tal vez os traicionareís unos a otros) - todo esto para completar tus objetivos secretos. También tendrás que adivinar el objetivo secreto de los otros jugadores para poder beneficiarte de ello.Los jugadores también deben tener cuidado con los nativos, si los haces demasiado infelices o si muchos de ellos no están ocupados, podrían rebelarse y declarar la independencia. ¡Entonces todo el mundo pierde!
En el Deus los jugadores trabajan para desarrollar sus civilizaciones en un entorno compartido. Cada jugador comienza el juego con cinco cartas de edificios y en su turno los jugadores deciden si construir o hacer ofrendas a los dioses.
Cuando se construye, se colocan las fichas de edificios en las diferentes secciones del tablero modular, que varía el tamaño según el número de jugadores, y diferenciado por los colores de las cartas según sean militares, religiosas, de puntuación, etc.
El juego termina cuando se haya acabado con todas las tribus bárbaras en el tablero o cuando se hayan construido todos los templos, entonces el jugador con más puntos de victoria gana.
