Súcubo: son la élite dirigente de los Cultos de Brujas . Elegantes y bellas hasta lo imposible de creer, se mueven por entre el fragor de la batalla como si hubieran nacido para ello, actuando rodeadas de grupos de sus letales sirvientas que buscan oponentes alienígenas dignos de ser asesinados por sus amas y señoras. Es normal verlas tomando el mando de las incursiones en el espacio real, no sólo por el mero placer del saqueo, sino también para poder dar caza a los campeones de otras razas y derrotarlos en espectaculares demostraciones de maestría.
Señor de las Bestias: Desde la fundación de Commorragh, hace ya varios milenios, las arenas se han cubierto de la sangre de millones de guerreros. Cada arena ha sido testigo de infinidad de espectáculos de perversidad y muerte, pero hay un combate de gladiadores preferido que nunca de ja de tener popularidad: las salvajes cazas de los Señores de las Bestias.Cuando acompañan una incursión en el espacio real, los Señores de las Bestias planean sobre el campo de batalla, acosando a sus salvajes bestias para que desgarren yu mutilen todo con lo que se cruzan, mientras que ellos, aniquilan todo lo que se les acerca demasiado.
Bestia Garrápoda: es una enorme masa de músculos y pelo con sentidos extremadamente avanzados, capaz de ver diferentes espectros de luz al mismo tiempo. Cuando resulta herida, la Bestia Garrápoda suele entrar en un estado de furia asesina; pocos son los oponentes suficientemente rápidos como para evadirlo una vez que olido el pútrido hedor de su propia sangre.
Kymera:
Las bestias de la Disformidad conocidas como Kymeras son una prueba viviente de las aptitudes de los Señores de las Bestias como cazadores de espíritus. Cada Kymera es un ser salido de una dimensión del Caos conocida como el Empíreo, nacida de la materia de un Mundo-Demonio y situada más allá del velo de la realidad. Una Kymera puede causar estragos en un campo de batalla del espacio real, antes de ser abatida y disolverse como si estuviera hecha de niebla.
Bandadas de Filoplumas: están poseídas por hambre insaciable de huesos y caen desde el cielo como un huracán, utilizando sus picos serrados y sus plumas afiladas como cuchillas para arrancar toda la carne de sus presas. Una Bandada de Filoplumas bien entrenada se llevará por los aires el sanguinolento esqueleto de la víctima, revoloteando con él sobre la cabeza de su Señor de las Bestias antes de devorar todos los huesos, haciéndolos desaparece en un frenesí que apenas dura unos segundos.
También deciro que tenemos el codex de los Caballeros Grises para quien quiera echárle un vistazo en la tienda.
