También disponible en su versión con las pinturas incluidas
Desde los túmulos se arrastran antiguos esqueletos y cadáveres en descomposición, invocados por la oscura hechicería de Nagash, Señor Supremo de los muertos vivientes. Más anciano que el mundo, cruel e infinitamente calculador, Nagash anhela rehacer los Reinos Mortales a su propia imagen, transformándolos en un ordenado imperio poblado de esclavos sin mente ligados a su voluntad. Ante él restalla el trueno mientras los Stormcast Eternals, campeones celestiales del Orden, se enfurecen al afrontar de cara semejante amenaza en enfrentamientos épicos que decidirán el destino del mundo. Ésta es una nueva época repleta de batallas memorables en el marco de una guerra sin fin. Tiempo de héroes y monstruos. ¡Es la Era de Sigmar!
Ideal para los recién llegados a Warhammer Age of Sigmar, y al extenso hobby de coleccionar, montar, pintar y jugar con miniaturas Citadel, Tormenta de almas es un set de inicio repleto de miniaturas, reglas y accesorios para que te pongas a jugar en un abrir y cerrar de ojos. Incluye 32 miniaturas repartidas entre las facciones de los heroicos Stormcast Eternals y los espectrales Nightaunt no muertos, ambos enemigos mortales enfrentados en un combate sin final, junto con guías detalladas sobre cómo montar, pintar y jugar con ellas.
Desde los túmulos se arrastran antiguos esqueletos y cadáveres en descomposición, invocados por la oscura hechicería de Nagash, Señor Supremo de los muertos vivientes. Más anciano que el mundo, cruel e infinitamente calculador, Nagash anhela rehacer los Reinos Mortales a su propia imagen, transformándolos en un ordenado imperio poblado de esclavos sin mente ligados a su voluntad. Ante él restalla el trueno mientras los Stormcast Eternals, campeones celestiales del Orden, se enfurecen al afrontar de cara semejante amenaza en enfrentamientos épicos que decidirán el destino del mundo. Ésta es una nueva época repleta de batallas memorables en el marco de una guerra sin fin. Tiempo de héroes y monstruos. ¡Es la Era de Sigmar!
Ideal para los recién llegados a Warhammer Age of Sigmar, y al extenso hobby de coleccionar, montar, pintar y jugar con miniaturas Citadel, Golpe de tormenta es un set de inicio que incluye 15 miniaturas de encaje a presión divididas en las facciones de los heroicos Stormcast Eternals y los espantosos Nighthaunt, enemigos mortales trabados en una lid sin final, junto con guías detalladas sobre cómo montar, pintar y jugar con ellas.
Reikenor fue antaño un rey hechicero con un gran conocimiento de la magia amatista que se enemistó con Nagash. Ahora, en su no-vida, el Grimhailer está condenado a servir al Gran Nigromante como su principal segador de almas. Pocas cosas producen tanto pavor como ver al macabro mago espectral en su montura alada, iluminado por la inquietante luz de sus velas cadavéricas. Mediante sus encantamientos, Reikenor puede invocar una tormenta de espectros, un ciclón de magia amatista que se apodera de las almas separadas recientemente de sus cuerpos. Su hechizo las incita a atacar salvajemente a sus antiguos camaradas como un huracán que destroza y se lleva a los vivos; su oscura venganza contra quienes se oponen a Nagash.
Los Dreadblade Harrows son los oficiales por debajo del Knight of Shrouds. En vida, todos estos espectros observaron la traición de su líder, sin ayudarle ni tratar de detenerle. Incluso entre los Nighthaunts, los Dreadblade Harrows son especialmente incorpóreos, capaces de desaparecer y reaparecer a voluntad. Son los Caballeros del Arrepentimiento, repletos de amarga recriminación, y en batalla sirven de guardaespaldas y lugartenientes o son usados como avanzadilla. Espoleando sus corceles espectrales, desaparecen entre la niebla y aparecen galopando de la nada en otro lugar para cumplir las órdenes menos honorables: ir a por los más vulnerables, cortar retiradas y otras tareas viles.
En vida, Kurdoss Valentian tenía un deseo implacable de gobernar, y llevó a cabo muchas atrocidades para lograr el poder. Nagash se aseguró de que su sueño sólo se cumpliera de cara a la galería, sin embargo, puesto que le convirtió en el brazo ejecutor de Lady Olynder y lo puso por siempre a su servicio. La temible presencia de Kurdoss Valentian es anunciada por trompetas fúnebres y macabras proclamas de sus más viles hazañas. El Craven King se sienta silencioso e inmóvil sobre su trono flotante hasta estar cerca del enemigo, y entonces blande el Cetro Sepulcral con una efectividad letal, masacrando sin piedad a quienes ordena su reina.
Los líderes de las Cámaras Sacrosantas, maestros de los relámpagos aetéricos capaces de manipular la energía cerúlea de Azyr, se conocen como Lord-Arcanums. Su vista de tormenta les permite divisar las almas de las criaturas vivas, y pueden arrojar rayos destructivos y fortalecer a los guerreros que les rodean con sólo susurrar un encantamiento. Los Lord-Arcanums que montan Celestial Dracolines en batalla suelen ser grandilocuentes y belicosos, y más les vale serlo, pues si un jinete no se gana el favor de su Dracoline, éste no tarda en abandonarlo... o aún peor, despedazarlo con sus garras.
Celestar Ballista
Los Sacristan Engineers de las Cámaras Sacrosantas provienen del Cónclave Ordinatus, a veces llamado el Cónclave del Relámpago por el efecto devastador que puede tener en batalla. Estos ingenieros de guerra operan la artillería mágica de la cámara. Cuando se despliega una Celestar Ballista para defender un lugar sagrado, acercarse demasiado puede implicar una muerte explosiva. Sus proyectiles grabados con runas están cargados de relámpagos extraídos de la cumbre de un Sigmarabulum, y se lanzan como ráfagas de energía blanquiazulada contra el enemigo. Si aciertan, atraviesan al blanco y estallan en una explosión encadenada de fuerza arcana.
Los ojos de un Evocator en plena furia de batalla brillan y echan chispas, y bajo la piel se le marcan las venas cargadas de electricidad; esa misma energía recorre su espada tempestad y su varatormenta mientras avanzan, brotando en arcos voltaicos que buscan el suelo. Esos estallidos son mortíferos y pueden chamuscar a cualquiera que esté cerca si no se canalizan de forma consciente y cuidadosa; pero cuando eso sí ocurre, esa energía puede servir para fortalecer a otros Stormcast Eternals con el poder de Azyr. Cuando sus varatormentas y espadas tempestad golpean al enemigo, los hilos de energía cautiva que unen sus armas envuelven al enemigo, quemándolo hasta los huesos antes de saltar de vuelta al armamento de sus amos una vez más. Incluso una horda orruk se resentirá ante el ímpetu de un asalto masivo de Evocators.
