En MIL puedes cosechar tus tierras para obtener recursos y reclutar soldados. Pero, sobre todo, tienes que asegurarte de que tu linaje se perpetúe. Si consigues un heredero puedes casarlo con la hija de otro jugador: el que ofrezca la mejor dote, claro. No olvides que durante la partida tus caballeros morirán o se retirarán y sus hijos deberán ocupar su lugar.
Conocer las intrigas de la corte te ayudará a conseguir influencia y vasallos, mientras que en el mercado podrás comerciar y reclutar los trabajadores necesarios para construir un castillo. ¿Ir a la batalla para conseguir nuevas tierras o ayudar a la curia a levantar la catedral? La abadesa del monasterio puede bendecirte con influencia, mientras los ecos de las cruzadas resuenan en tierras lejanas con canciones de gloria y honor. No hay un único camino que conduzca a la victoria. ¿Cuál escogerás?
¡Felicidades! Acabas de abrir la primera tienda de mascotas de la ciudad
. Justo al lado de la otra primera tienda de mascotas de la ciudad. Y cruzando la calle hay dos mas...
¡Compra monstruitos recién nacidos! ¡Aliméntalos y mira cómo crecen! ¡Limpia sus jaulas!
Sí, llevar una tienda de mascotas puede ser divertido para un diablillo, pero también es un reto mental. ¿Qué harás para ganar la siguiente exhibición? ¿Qué mascota se adapta mejor a las necesidades de tus clientes? ¿Cómo de robusta tiene que ser su jaula? Y si te equivocas, ¿cuántas camas deberías reservar en el hospital para los diablillos heridos
?
Ganar o perder es lo de menos cuando estás ante la gran inauguración de “Dungeon Petz”